Diseño: El primer paso es diseñar el rompecabezas, lo que incluye elegir la imagen que se utilizará, determinar el número y tamaño de las piezas del rompecabezas y crear una plantilla o plano para el rompecabezas.
Impresión: Una vez finalizado el diseño, la imagen se imprime en papel o cartulina. Esta imagen impresa servirá como guía para cortar las piezas del rompecabezas de madera.
Montaje: Luego, la imagen impresa se monta sobre una fina lámina de madera, generalmente hecha de madera contrachapada o MDF (tablero de fibra de densidad media). Luego, la madera se corta en piezas de rompecabezas individuales utilizando una máquina de corte por láser o una sierra.
Lijado: Una vez cortadas las piezas, se lijan para garantizar que tengan bordes lisos y estén libres de asperezas o astillas.
Clasificación: A continuación se clasifican las piezas y se colocan en bolsas o cajas, según su forma y tamaño. Normalmente esto se hace a mano.
Embalaje: Finalmente, las piezas del rompecabezas se empaquetan, generalmente en una caja hecha del mismo tipo de madera que se usa para fabricar las piezas del rompecabezas. La caja suele estar adornada con la misma imagen que el rompecabezas y puede incluir una imagen del rompecabezas completo como referencia para quien lo resuelve.
En general, el proceso de producción de rompecabezas de madera requiere una combinación de artesanía calificada y tecnología moderna para crear un producto de alta calidad que sea a la vez estéticamente agradable y divertido de resolver.